Titulo así esta entrada porque es algo en lo que creo desde hace tiempo y que nunca pierde vigencia. Siempre que se quiere institucionalizar un movimiento disidente aparecerán dobles agentes, disonancia, luchas sobre quien lleva la voz cantante, peleas por ser el portavoz o para escoger que agenda subrayar, cae de cajón, pero la humanidad siempre se ha topado contra este muro.
Ahora pongámonos más esótericos y veamos el siguiente vídeo del minuto 45 al 55 de Erik Davis (escritor, académico, periodista y orador público estadounidense cuyos escritos van desde la crítica del rock hasta el análisis cultural y las exploraciones creativas del misticismo esotérico) en el que menciona al teólogo Walter Wink (biblista, teólogo y activista estadounidense, figura importante del cristianismo progresista y teología liberal), el cual habla sobre las instituciones como egregores "arcónticos", los TPTB (the powers that be, Los poderes que rigen, Este acrónimo representa la frase del apóstol Pablo, es de su carta a los Romanos, capítulo 13, versículo 1).Aquí también podríamos señalar el siguiente versículo: "Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes". Efesios 6:12, según Walter Wink las instituciones envilecen los ideales, conforman un egregor (concepto propio del ocultismo que viene a representar una “forma de pensamiento” o “mente colectiva”, esto es, un entidad psíquica autónoma capaz de influir en los pensamientos de un grupo de personas. La simbiótica relación entre un égregor y su grupo ha sido comparado con los conceptos recientes no ocultistas de empresa o corporación (como entidad jurídica) y el meme..
Sin más, dejo el vídeo de Erik Davis (del minuto 45 al 55 lo señalado en esta entrada, aunque recomiendo visionado entero) titulado: Arkonología: Las mitologías gnósticas de la conspiración, recordando que se pueden activar los subtítulos automáticos en inglés.
Cracking the Gnostic Code: The Powers in Gnosticism (Walter Wink)
ResponderEliminarEste delgado volumen de Walter Wink ofrece un ensayo hermenéutico sobre el gnosticismo que aplica las ideas de sus anteriores estudios sobre el tema de los "poderes" en el Nuevo Testamento. El movimiento básico de la empresa hermenéutica de Wink es que el lenguaje mítico antiguo puede y debe leerse, a la luz de la moderna psicología profunda, como una descripción de las dimensiones interiores de la vida personal y social.
Tras exponer la clave para "descifrar el código", Wink ofrece un esbozo del mito gnóstico que se basa en gran medida en el Tratado Tripartito Valentiniano (Códice Nag Hammadi I, tratado 5). Procede a analizar el "sistema delirante" de dominación descrito en los mitos gnósticos, el proceso de salvación de ese sistema que propugnaban los gnósticos y las implicaciones éticas, en gran medida ascéticas, que los gnósticos extraían de su análisis.
Wink deja claro que el objetivo de su ensayo no es defender o rehabilitar el gnosticismo en general; de hecho, considera objetable la soteriología escapista de la mayoría de los gnósticos. Más bien, quiere recuperar una idea válida que cree que los gnósticos comparten con otros cristianos primitivos: que el mundo implica un sistema opresivo y alienante de dominación y explotación. A lo largo del ensayo aparecen ejemplos de cómo podría aplicarse esta idea, incluyendo casos tan actuales como la reforma del sistema sanitario.
La afirmación de que los mitos gnósticos implican una representación crítica de las estructuras de poder, tanto sociales como psicológicas, es seguramente correcta y, con toda seguridad, bien reconocida por los estudiantes y gnósticos, a los que Wink cita generosamente. La afirmación de que la psicología profunda de Jung es una herramienta particularmente útil para desentrañar el simbolismo gnóstico, aunque defendida por sabios como Gilles Quispel, no es tan obvia. Un relato más completo contendría, sin duda, un análisis más diferenciado de los tipos de estructuras de poder que diversos grupos gnósticos, en distintas épocas y lugares, intentaron analizar y resistir. También proporcionaría un relato más articulado del nivel de sofisticación en el uso de modelos mitológicos y de otro tipo para hacer frente a lo que se percibía o sentía como sistemas sociales y psicológicos de opresión. Las cuestiones planteadas por Wink merecen un estudio más profundo. Los historiadores de la religión seguirán investigando las estructuras y sistemas particulares ante los que reaccionaron los gnósticos y que parodiaron en sus mitos e historias. Los predicadores y profesores pueden seguir indagando en los textos gnósticos en busca de estrategias imaginativas de reflexión crítica.
https://es1lib.org/book/5631753/7c6288
Una entrevista muy interesante de ver en estos tiempos Plandémicos ...
ResponderEliminarhttps://odysee.com/@JorgeGuerra:4/Entrevista_a_la_Abogada_CRISTINA_ARMAS_verdadera_DEFENSORA_DE_LA:a?r=12umxtvSeH31axRJTUcvygRv2hpHvE7a
Entrevista a la abogada antiplandemia Cristina Armas
Tras 4 horas durmiendo me despierto sobresaltado, una pesadilla muy mundana, muy emocional, muy ligada a mi identidad, el misterio de misterios, ni Lovecratf ni pollas, ya lo decía la inscripción del oráculo de Delfos.
ResponderEliminarPienso, que ellos no quieren que cese el conflicto en el que nos tienen viviendo, por eso es importante no alimentar el conflicto. Ni si quiera querer hacer algo, para cambiarlo, por que pareciera que aquellos que hacen algo, lo hacen mas grande.
ResponderEliminarEs sorprendente la poca gente que entendió Dune.
ResponderEliminarEs como si no pudieran conciliar los conceptos de un buen hombre y un mal resultado juntos.
Este es el objetivo de Dune. Es una advertencia sobre la fusión de la Iglesia y el Estado, sobre los peligros de los cultos a la personalidad, de la idolatría.
Si crees que "Paul es malo", te has perdido el punto de la historia, que es que las estructuras de poder tienen vida propia y limitan a quienes ejercen ese poder.
Si Paul fuera malo, entonces existiría la posibilidad de que colocar a un buen hombre en su posición condujera a un buen resultado. Pero como Paul no es malo, podemos ver la implicación de que la posición de Paul, no su carácter, es lo que conduce a los numerosos malos resultados de los libros.
Siendo profético, ve esto, y gran parte de la historia de él y su heredero, Leto II, está dedicada a su lucha, no contra enemigos externos, sino contra las limitaciones de su propio poder, posición y leyenda.
El "camino dorado" es un hilo de posibilidades que se vislumbra vagamente mediante el cual eventualmente se puede lograr un buen resultado para la humanidad, pero se producirá como resultado de la destrucción de todo lo que Paul y Leto han construido.
El hecho de que se esfuercen por lograr ese resultado es un testimonio de su carácter moral.
Por eso Tolkien odiaba Dune. Era una contradicción directa con el tema autoritario básico de El señor de los anillos. En El señor de los anillos, el poder es simple; lo ejerce una autoridad central y todos deben arrodillarse. La única pregunta es si será una autoridad mala o buena, Sauron o el Rey Verdadero que ha Retornado.
No existe ninguna noción de una burocracia que tenga su propia influencia y carácter, ni tampoco hay ninguna noción de malos resultados debido a buenas intenciones, no hay noción de que el mundo es complejo, que los resultados son difíciles de juzgar, que el sufrimiento puede surgir de un error con la misma facilidad. como por malicia.
Simplemente encuentre un rey noble, colóquelo en el trono y listo.
En Dune, Paul es el rey noble, y la maldad de su gobierno no surge de Paul como hombre, sino de la institución misma de la realeza.
https://x.com/Devon_Eriksen_/status/1770171779849617899?s=20
Robert Heinlein
ResponderEliminarhttps://i.imgur.com/cuebjMR.jpg